
Juliette Karagueuzoglou
Visualizando la perfumería como un acto de generosidad, desea crear fragancias como marcadores olfativos que perduren a través del tiempo, permitan conexiones, hagan que las aventuras duren, ofrezcan recuerdos vívidos, provoquen emociones, evocando una forma de eternidad. Convertirse en perfumista fue su sueño, cumplido en 2007, después de sus estudios en Isipca. Juliette dice: “Mis ideas pueden ser conceptos, una especie de ejercicio donde, por ejemplo, cada materia prima debe comenzar con una “C””. Con Memo Paris, el encuentro se produce gracias a un "S" como Sherwood, en este bosque que le recuerda la belleza de las esencias amaderadas y para el cual imagina un palacio de sándalo. Luego imaginó un acorde de cuero intenso y majestuoso, con Indian Leather, basado en Cypriol y oud.